jueves, 19 de mayo de 2011

El ojo de Polisemo - III Encuentro Universitario-Profesional de la Traducción Literaria (2ª jornada)


La última jornada de "El ojo de Polisemo", que se desarrolló el sábado 14 de mayo, comenzó con una conferencia conjunta en la que Carlos Milla, traductor profesional, y la profesora de la UA Magdalena Martínez describieron las principales dificultades de la traducción de novela histórica y realizaron una distinción de qué responsabilidades pueden exigirse al traductor de una obra y cuáles deben achacarse únicamente a su autor. No obstante hicieron hincapié en que el editor siempre espera que el traductor esté atento a los errores del original y los subsane en su traducción. De esta manera se reitera la idea de que en ocasiones el traductor llega a mejorar el texto original.

Sobre las buenas y malas prácticas editoriales y laborales, Carmen Francí y Carmen Montes –ambas pertenecientes a ACE Traductores– destacaron la necesidad de que el traductor profesional conozca la Ley de Propiedad Intelectual 1/1996 en la que se otorga al traductor la categoría de autor (de su traducción) y por tanto se le conceden una serie de derechos. Del mismo modo hicieron referencia al Código deontológico del CEATL  al hablar sobre las buenas prácticas profesionales del traductor y realizaron un breve resumen de los puntos más importantes del Libro Blanco de la Traducción, que puede consultarse en la web de ACE Traductores. Resulta destacable la defensa que hicieron del Artículo 64 de la Ley de Propiedad Intelectual 1/1996 por el que el traductor tiene derecho a exigir que se respete su obra.

Tras tan ilustrativa charla se dio paso a una mesa redonda moderada por Catalina Iliescu, profesora de la Universidad de Alicante y directora de la Sede Universitaria de Alicante, sobre las lenguas minoritarias como forma de traducción (cultural) especializada. Intervinieron en ella los traductores Luisa Fernanda Garrido, Peter Bush y Adan Kovasics quienes, tras debatir diversas cuestiones de la traducción de escritos literarios redactados en lenguas de menor circulación, convinieron en que el idioma en sí no supone tanto un problema como el estilo literario del autor y que en realidad la traducción siempre es especializada sea en el idioma que sea. Asimismo resaltaron la gran calidad de la literatura que se escribe tanto en los países de Europa del Este como en los nórdicos y halagaron los grandes esfuerzos que realizan estos Estados al ofrecer ayudas y subvenciones para la traducción de sus obras literarias con el objetivo de contribuir a su difusión fuera de sus respectivas fronteras.

Más tarde Adan Kovasics y Belén Santana, miembros de ACE Traductores, realizaron una completa exposición de las diferentes asociaciones profesionales de traductores e intérpretes que se hallan en nuestro país (ACE Traductores, APTIC, la Xarxa, ASETRAD, etc.) y destacaron el alto grado de colaboración entre ellas, que llegan incluso a organizar actividades conjuntas para defender los intereses del sector. Además nos hablaron sobre los distintos foros y redes sociales en las que dichas asociaciones junto con los profesionales del sector suelen estar presentes, y facilitaron a los asistentes información de todo tipo relacionada con la traducción (publicaciones, revistas, becas, premios, etc. )

La última conferencia corrió a cargo de Miguel Ángel Campos, profesor de la UA e Intérprete jurado de inglés, quien destacó un incremento de la variedad en la formación traductor y realizó un profundo análisis de los distintos problemas de la traducción de novelas de temática especializada (en concreto de las de ámbito jurídico), en especial de las dicotomías y los problemas contextuales fruto de las diferencias entre los sistemas judiciales de los distintos países.

Concluyó este interesantísimo encuentro con un ilustrativo y desenfadado resumen del mismo por parte de Catalina Iliescu, que una vez más hizo alarde de su característico derroche de energía y sentido del humor.

miércoles, 18 de mayo de 2011

I Curso de Traducción Jurídica inglés-español con Silvia Ponce

El próximo sábado 28 de mayo la Xarxa de traductors i intèrprets de la Comunitat Valenciana organiza su I Curso de Traducción Jurídica inglés-español a cargo de la intérprete profesional y miembro de fundador de AVIC (Asociación Valenciana de Intérpretes de Conferencia) Silvia Ponce. 

Mediante el curso se pretende aportar conocimientos jurídicos que permitan la comprensión y traducción al español de textos jurídicos redactados en inglés. Para ello se llevarán a cabo diversas traducciones de documentos relativos al derecho civil, mercantil, de la administración de justicia, etc. 

Con anterioridad a la realización del curso, se facilitará a los participantes un texto para traducir sobre el cual se trabajará durante el transcurso del mismo. 

El curso se desarrollará el sábado 28 de mayo, de 9 h. a 14 h. en la UEM (C/ General Elio, 2, entreplanta).

Los precios de asistencia son los siguientes:

  • Miembros de pleno derecho de la Xarxa y de otras asociaciones adscritas a ASOCESP: 40 €
  • Miembros asociados de la Xarxa: 60 €
  • Resto de asistentes: 80 €
La inscripción puede realizarse  a lo largo de toda esta semana a través de la web de la Xarxa, en el apartado actividades: http://www.xarxativ.es/actividades.asp

martes, 17 de mayo de 2011

El ojo de Polisemo - III Encuentro Universitario-Profesional de la Traducción Literaria (Inauguración y 1ª Jornada)


Los pasados días 12, 13 y 14 de mayo se celebró en Alicante el III Encuentro Universitario-Profesional de la Traducción Literaria "El ojo de Polisemo", que este año llevaba como título "El oficio de indagar" y se centró en los lenguajes especializados en la traducción literaria. La cita tuvo lugar en la Sede Universitaria de Alicante y el encuentro estuvo organizado por ACE Traductores y la Universidad de Alicante (UA).

Tras la inauguración oficial del acto por parte de las autoridades pertinentes, abrió el encuentro la autora de novela negra y traductora literaria Teresa Solana quien nos habló de las dificultades para el autor-traductor de traducir su propia obra y lo frustrante que resulta un proceso que implica una relectura del original en la que éste detecta posibles mejoras en el texto una vez que el libro ya ha sido editado. Asimismo pudimos saber cómo afronta ella misma la traducción de sus obras a otros idiomas por parte de otros compañeros traductores, al respecto de lo cual puntualizó que "los buenos traductores suelen mejorar los textos" y que prefiere que el traductor sea fiel al contenido y a la musicalidad de la obra a que lo sea a las palabras empleadas por el autor. 

Durante la jornada del viernes se desarrollaron otras interesantes ponencias como la titulada "La traducción de las novelas policiacas y sus problemas (de las autopsias a la balística)" en la que la traductora Carmen Montes y el novelista y comisario jefe de la Policía Local de Gijón, Alejandro M. Gallo, pusieron de manifiesto con gran sentido del humor las principales diferencias entre los sistemas judiciales y policiales de los diferentes países y cómo afectan a la traducción de la novelas policiacas. Surgió además el debate sobre si al traducirlos se deben naturalizar. También pudimos conocer de la mano de Carmen Montes cómo se documentan los traductores literarios durante el proceso de traducción de novelas de temática especializada.

En la conferencia sobre la "Edición digital" María Teresa Gallego Urrutia, de ACE Traductores, y Arantxa Mellado Bataller, de Ediciona, realizaron una completa radiografía de la situación actual de las editoriales y de la relación entre traductores y editores. Ambas ponentes llevaron a cabo una exhaustiva descripción de las principales dificultades que las ediciones digitales plantean en la actualidad a las editoriales en cuanto a formatos de edición y gastos de producción, y a los traductores en materia de derechos de autor entre otras. 

Benito Gómez Ibáñez, traductor de El infierno digital, de Philip Kerr,  fue el encargado de desarrollar una conferencia sobre la traducción de las novelas de tipo informático en la que se abordaron las dificultades nada deleznables que plantea un campo específico cuyo vocabulario plagado de anglicismos se encuentra además en constante evolución

La mesa redonda más esperada de la tarde, "Contratos, facturas, procesos: cómo diablos empezamos a traducir", no decepcionó a estudiantes y traductores noveles que vieron resueltas todas sus dudas sobre cómo iniciarse en el mundo de la traducción profesional y sobre diversas cuestiones como los tipos de contratos, obligaciones del traductor y de la editorial, situación del mercado, etc. 

Por su parte Javier Franco Aixelà, profesor de la Universidad de Alicante por todos muy querido y admirado, realizó una excelente ponencia sobre el lugar que ocupa la teoría en la traducción y resaltó que, si bien se puede traducir con éxito sin conciencia teórica, ésta nos permite entender mejor el mundo y cuestionar las verdades heredadas de manera que, como traductores, podamos elegir libremente la opción que consideremos adecuada. Hizo hincapié también en que al leer cada uno realiza su propia interpretación del texto y que, por tanto, cuando leemos una traducción en cierto modo estamos leyendo la interpretación del traductor. Asimismo diferenció entre la teoría descriptiva y la prescriptiva y concluyó con la afirmación de que para el traductor "no existe la traducción perfecta sino que siempre hay que elegir entre opciones defendibles", opinión que comparto plenamente con él. 

Para finalizar la jornada los alumnos de la Licenciatura en Traducción e Interpretación de la Universidad de Alicante, que habían colaborado en la organización del encuentro, tomaron la palabra y expresaron sus dudas e incertidumbres acerca de su futuro profesional en el mundo de la traducción, lo que dio lugar a un enriquecedor intercambio de consejos e información entre ellos y los profesionales que nos encontrábamos entre el público asistente.

Sin duda resultó una jornada muy completa que destacó por la gran cantidad de información aportada por los conferenciantes y asistentes, además del provechoso y enriquecedor intercambio de opiniones y los debates en petit comité que se generaron entre los asistentes durante los descansos.